No es raro ver a celebridades masculinas posando orgullosas con sus recién nacidos, aun cuando ya pasaron largamente los 50 o 60 años. Desde actores de Hollywood hasta estrellas de la música, pareciera que la edad no es un problema cuando se trata de ser padres. Las fotos perfectas, las sonrisas amplias, los brazos cargando bebés sin mostrar signos de cansancio, dan la impresión de que cualquier hombre puede convertirse en padre por métodos naturales en cualquier momento de su vida. Sin embargo, detrás de esos flashes, la realidad cuenta otra historia.
Sin embargo, la infertilidad masculina, que afecta a un tercio de las parejas con dificultades para lograr embarazos, es un tema que ha estado solapado. En este sentido, Gastón Rey Valzacchi, director médico de Procrearte, la red de medicina reproductiva más grande de Latinoamérica, comenta que "es habitual que la consulta médica inicial se enfoque en la mujer. Las mujeres suelen tener un acceso más directo a los cuidados médicos, mientras que los hombres muestran mayor resistencia a buscar ayuda. Esta reticencia", señala Rey Valzacchi, contribuye a que los problemas de infertilidad masculina se detecten tardíamente, lo que complica aún más el cuadro¨.
El concepto de infertilidad masculina es complejo y multifactorial. Según Rey Valzacchi, la infertilidad se define como "la incapacidad de una pareja, que ha mantenido relaciones sexuales sin protección durante un año, para lograr el embarazo". Aproximadamente el 90% de las parejas sanas logran concebir en este lapso, pero cuando esto no ocurre, se requiere un análisis detallado de ambos miembros de la pareja, ya que la infertilidad no discrimina entre géneros.
"La fertilidad es una cuestión de pareja", subraya el especialista. Cada miembro tiene un potencial reproductivo que, sumado al de su pareja, determina el éxito en la concepción. En muchas ocasiones, un hombre puede presentar problemas de fertilidad con una pareja y no con otra, debido a la variabilidad de los potenciales reproductivos individuales.
Un estudio publicado en la revista Jama Network, de la Asociación Médica Estadounidense, basado en más de 46 millones de nacimientos en Estados Unidos entre 2011 y 2022, analizó las tendencias sociodemográficas y los resultados perinatales en padres de 50 años o más. Los investigadores compararon los efectos de la edad paterna en la gestación, concluyendo que cada aumento de diez años en la edad del padre se asociaba con un incremento en las complicaciones durante el embarazo, aun considerando la edad de la madre y otros factores. Un dato clave fue que el riesgo de parto prematuro aumentó en un 16% cuando los padres tenían más de 50 años en comparación con los padres de 30 a 39 años.
El estudio también mostró que los padres mayores tenían un 14% más de probabilidad de tener hijos con bajo peso al nacer y un 13% más de riesgo de que la madre desarrollara diabetes gestacional.
La fertilidad masculina está disminuyendo a nivel global. La caída en la calidad del esperma, junto con los cambios en los hábitos de vida y factores ambientales, como la exposición a contaminantes, generó una crisis de fertilidad masculina sin precedentes
A nivel internacional, la tendencia es similar. En Alemania, la edad media de los padres al tener su primer hijo subió a 34,6 años, mientras que en Francia y Holanda las edades medias se situaron en 33 y 32,8 años, respectivamente. Los estudios también demostraron que las mujeres cuyas parejas tenían 45 años o más tardaban casi cinco veces más en concebir que aquellas con parejas de 25 años o menos. Además, se reportó un mayor riesgo de aborto espontáneo en parejas con hombres de mayor edad.
Por otro lado, uno de los estudios más completos en la materia, publicado por Oxford Academic, analizó muestras de más de 57.000 hombres de 53 países en cinco continentes. Los resultados de este estudio revelan una tendencia alarmante: la fertilidad masculina está disminuyendo a nivel global. La caída en la calidad del esperma, junto con los cambios en los hábitos de vida y factores ambientales, como la exposición a contaminantes, generó una crisis de fertilidad masculina sin precedentes.
Entre las principales causas de infertilidad masculina, destacan los factores hormonales, genéticos, ambientales y de salud general. Desde alteraciones en la producción de espermatozoides hasta la cuestión de su calidad, la infertilidad masculina puede ser provocada por un conjunto de factores que, en algunos casos, pueden pasar desapercibidos por la falta de síntomas evidentes. Rey Valzacchi señala que "la fragmentación del ADN espermático", una condición que afecta la calidad del material genético en los espermatozoides, es una de las causas más comunes de infertilidad en los hombres. Esta fragmentación impide el desarrollo adecuado de los embriones, lo que lleva a una mayor tasa de fallos en los intentos de fertilización y, en muchos casos, a abortos espontáneos.
"La fragmentación del ADN espermático", una condición que afecta la calidad del material genético en los espermatozoides, es una de las causas más comunes de infertilidad en los hombres
“Para aclarar esto debemos conocer que el espermatozoide está constituido por una cabeza y una cola; en la cabeza está el núcleo que es donde está el ADN. Cuando el espermatozoide ingresa al óvulo en realidad lo que le aporta es el ADN. Hoy tenemos fuertes evidencias que la alteración (fragmentación) de este ADN va a llevar a la formación de embriones de no buena calidad y por lo tanto a la posibilidad de que los embriones no se implanten o se pierdan en algún momento”, profundiza y Hemos trabajado mucho en cómo disminuir esta fragmentación del ADN, utilizando medicamentos antioxidantes, pautas de abstinencia sexual al obtener las muestras y muy especialmente en técnicas de selección espermática para poder seleccionar aquellos espermatozoides sin daño del ADN. También somos referentes en la utilización de espermatozoides obtenidos directamente del testículo en casos muy seleccionados ya que estos tienen menos daño”.
Rey Valzacchi, precisamente, expondrá sobre esto en el próximo congreso de la Sociedad Argentina de Medicina Reproductiva, así como también lo hará, en octubre, en el Congreso de la American Society of Reproductive Medicine (ASRM), que se llevará a cabo en Denver, Estados Unidos, donde fue invitado para exponer sobre las causas genéticas de la infertilidad masculina.
En los últimos años, el avance en las técnicas de reproducción asistida permitió abordar de manera más precisa las dificultades relacionadas con la infertilidad masculina. En Procrearte, se desarrollan estudios genéticos que permiten identificar alteraciones en los genes responsables de la formación y función del espermatozoide. Rey Valzacchi señala que "estos estudios genéticos nos permiten no solo diagnosticar la causa de la infertilidad, sino también predecir si es posible un tratamiento efectivo y qué tipo de tratamiento sería el más adecuado".
Uno de los avances más recientes es el desarrollo de técnicas de selección espermática que permiten seleccionar aquellos espermatozoides con menor daño en su ADN. Esto mejoró las tasas de éxito en los tratamientos de fertilización in vitro.
En cuanto al enfoque de Procrearte sobre la infertilidad masculina, Rey Valzacchi explica que la institución centra sus esfuerzos en abordar las dos principales causas de dificultades en la concepción: la edad reproductiva avanzada de la mujer y las alteraciones del semen. A nivel mundial, se observa un incremento en la edad promedio de las parejas que buscan concebir, lo que genera un aumento en la demanda de tratamientos de fertilización asistida. En este contexto, Procrearte está a “la vanguardia en la investigación sobre el rejuvenecimiento ovárico y en el desarrollo de técnicas para seleccionar los mejores espermatozoides en los tratamientos de fertilización in vitro”, suma Rey Valzacchi.
La resistencia de muchos hombres a buscar ayuda médica no solo retrasa el diagnóstico de posibles problemas reproductivos, sino que también agrava la situación. "Es común que los hombres asocien la fertilidad con su capacidad sexual y crean que, mientras tengan eyaculación, su fertilidad está intacta. Esto no siempre es así", afirma el especialista. A menudo, una simple consulta con un andrólogo puede ser suficiente para detectar.
La infertilidad masculina es una realidad que afecta a millones de parejas en todo el mundo.
Aunque la ciencia avanzó en el diagnóstico y tratamiento de esta condición, todavía queda mucho por hacer en términos de prevención y educación. "La infertilidad no es solo un problema femenino, y los hombres deben asumir un papel activo en el proceso de búsqueda de soluciones", concluye Rey Valzacchi.