La Inteligencia Artificial llegó a nuestras vidas para colaborar en todo aquello que parecía estar lejos de nuestro alcance, y hoy ha comenzado a cumplir un rol en nuestra sociedad, y sobre todo en muchos avances en la medicina en la cual ha sido incluida. Así lo explican el doctor Sergio Papier y la doctora Fiamma Di Biase, especialistas en medicina reproductiva de CEGYR.
"FertiQ es una estrategia que busca incorporar diferentes tecnologías ya sea para automatizar procesos o involucrar inteligencia artificial para no sólo mejorar los resultados reproductivos, sino fomentar la autonomía de los pacientes durante todo el proceso. Como resultado de la demanda de altos estándares de cuidado y resultados para los pacientes, se ha creado FertiQ en consonancia con la historia de la inteligencia artificial, que es una cronología de avance y evolución constante, impulsada por la creatividad, el ingenio y las necesidades humanas", detalló Papier.
"Su principal objetivo es destacar la calidad de las gametas involucradas no desde la concepción de sexo biológico o género, sino abordándolas desde una perspectiva integral y sus planes de familia. La aplicación de las diferentes aristas de FertiQ en forma sistemática permitiría mejorar los resultados reproductivos precisando las mejores estrategias que se adapten a las características particulares de cada uno de los pacientes", destacó Di Biase.
Dentro de FertiQ podemos encontrar herramientas aplicadas en diferentes etapas de la atención, cada una de ellas con diferentes etapas del proceso: OvoQ, SpermQ, EmbryoQ, EndoQ y NutriQ.
Los desafíos que supone la implementación de tecnologías de vanguardia, sobre todo de inteligencia artificial, impulsa a colaborar para aumentar la autonomía y libertad de las personas otorgándoles toda la información que los involucre y se encuentre disponible en el proceso de su tratamiento, asegurando así el respeto por sus derechos y la participación activa en todo momento.
"Entendemos que este tipo de tecnologías y su correcto uso favorece el acceso a tratamientos de calidad, sin importar las distancias, garantizando así un proceso más justo. Incorporar tecnologías de vanguardia a la experiencia y la formación continua de los profesionales involucrados, permite acercarnos más a una medicina reproductiva personalizada, que basa su pronóstico y opciones terapéuticas en la particularidad de cada uno, siendo altamente predictiva y de apoyo para los profesionales, cuya decisión y empatía no puede ser reemplazada", finalizó Papier.